Texto presentado por Begoña Piñero (Presidenta de la Tertulia) en el Acto Institucional del 8 de marzo de 2010
En este 8 de Marzo de 2010, en el que se presenta la CARTA LOCAL PARA LA IGUALDAD DE MUJERES Y HOMBRES DEL MUNICIPIO DE GIJÓN 2010/2014, es justo reconocer el trabajo de tantas mujeres que conforman nuestra historia. Aunque la historia oficial las haya ignorado sistemáticamente, nosotras no.
Pioneras que bajo la bandera del feminismo, aún no reconociéndose como tales, han conseguido que aquí y ahora nosotras nos sintamos orgullosas de lo conseguido y activas para seguir participando hasta conquistar un futuro para TODAS, más justo y equitativo y por ello inevitablemente más PARITARIO.
El feminismo es un hijo no querido de la Ilustración, como siempre nos dice Amelia Valcárcel. Es razón y es democracia. Victoria Sau lo define como “un movimiento social y político que se inicia formalmente a finales del siglo XVIII y que supone la toma de conciencia de las mujeres como grupo o colectivo humano de la opresión, dominación, y explotación de que han sido y son objeto por parte del colectivo de varones en el seno del patriarcado bajo sus distintas fases históricas de modelo de producción, lo cual las mueve a la acción para la liberación de su sexo con todas las transformaciones de la sociedad que aquélla requiera”.
Y en ello estamos, porque si algún movimiento social y político ha cambiado la vida de las personas, hombres y mujeres, ha sido el feminismo, a pesar de los muchos detractores y agoreros que nos quieren hacer creer que nuestras conquistas son fruto del devenir del tiempo. NO: NADA NOS HAN REGALADO Y NADA LES DEBEMOS.
Pero los tiempos cambian y vemos surgir “nuevos argumentos” para relegarnos a los ámbitos y tratos que la sociedad patriarcal nos tiene reservados.
Por ello, estaremos juntas y al quite para no retroceder. Una vez conseguidos los derechos, hay que velar para que permanezcan y sean ejercidos efectivamente.
Sabemos que hemos iniciado un camino cuyo fin es lograr que todas las personas tengan el mismo peso y valor social sin discriminaciones por género ni por sexo, y también sabemos que para lograrlo es necesario que el movimiento asociativo de mujeres no sólo tenga voz, sino además que sea escuchado por quienes tienen el poder para actuar desarrollando las medidas legales que nos faciliten avanzar hacia el final de ese camino.
El trabajo del Consejo de Mujeres de Gijón, creado en 1989 y formado por asociaciones de mujeres de carácter feminista y por otras propias del asociacionismo femenino, se inscribe, según acuerdo del propio Consejo, en el marco de una filosofía feminista transformadora capaz de favorecer la introducción de la perspectiva de género en la acción de gobierno municipal.
La reciente entrada en vigor de la Ley de Grandes Ciudades y de la Ley para la Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres implica profundizar y desarrollar la democracia participativa y representativa con mucho más empeño, lo que supone que conceptos como igualdad de género, paridad, empoderamiento y liderazgo se conviertan en elementos claves y vertebradores del trabajo para fortalecer la ciudadanía activa y plena de las mujeres.
Por tanto, es nuestro propósito reforzar y consolidar el Consejo de Asociaciones de Mujeres como órgano representativo del movimiento organizado de mujeres de la ciudad y capacitado para la negociación de propuestas en cualquier ámbito de actuación del gobierno local. E invitamos a las mujeres, sobre todo a las más jóvenes, a participar en el movimiento organizado para conseguir entre todas incorporar a la agenda de la igualdad las cuestiones que aún quedan pendientes.
En definitiva, como bien se dice en la Carta Local que hoy se presenta, se trata de dar el paso desde el “deber ser para otros” al “querer ser nosotras mismas”.