Soy Elisa Sesma, pertenezco junto con Mari Cruz Landa y Pablo Sánchez Valverde al grupo de ginecólogas/os que fuimos procesados en Pamplona en el año 87 y juzgados en enero de 1990 por haber realizado un aborto legal a una mujer que había sido radiada estando gestante. El grupo Acción Familiar, de ideología cercana al Opus Dei, presentó una querella criminal contra nosotras/os y contra la mujer alegando que no eran suficientes radiaciones, por lo que el aborto no entraba en los supuestos que esta ley recoge y nuestra intención no había sido otra que la de "asesinar al nasciturus".
Con esta acusación, Acción Familiar pretendía poner trabas, desprestigiar a los y las profesionales ante la sociedad y, en definitiva, intimidar a las mujeres para que no pudieran ejercer un derecho reconocido por ley y que ellos estaban dispuestos a impedir a cualquier precio.
En este año de 1990, Les Comadres decidieron otorgarnos a los tres la Comadre de Oro, por lo que yo, en representación del grupo, fui a Gijón.
Disfruté mucho en la "espicha". Nunca había estado en una cena tan multitudinaria de mujeres. Lo que más me llamó la atención y admiré, además de vuestra capacidad de convocatoria, fue la diversidad de estilos, culturas y niveles sociales que os habíais dado cita allí para disfrutar no sólo del Jueves de Comadres, sino de lo que aquello simbolizaba: la unión de mujeres a lo largo de todo el año.
Después conocí el local y la biblioteca. Vi reuniones y debates en algún vídeo y me explicasteis el funcionamiento del grupo, los cursos de autoestima, las discusiones mensuales sobre feminismo y cualquier otro tema de interés que se hubiera ido planteando.
Os he puesto de ejemplo muchas veces desde entonces al hablar de organizaciones que luchan por las mujeres. Me encantó el carácter abierto y amplio que facilita, a mi entender, que nadie se sienta rechazada y por tanto se acerque confiada a un grupo que le acoge y le ayuda a crecer.
El término feminista en su más amplio significado, el más adecuado para describir vuestra actividad, suscita rechazo en ciertos ambientes; sin embargo creo que habéis combinado con sabiduría la acción con la toma de conciencia de nuestra propia identidad de forma que nadie se siente extraña ni intrusa a vuestro lado.
Para mi, el fin de semana con les Comadres de Gijón no pudo ser más cálido.